miércoles, 25 de mayo de 2011

DECALOGO DE LA VIDA DE LA MADRE CARIDAD

Entre las muchas facetas de la vida de la Madre Caridad, se encuentran algunas que pueden resumirse en un "DECALOGO" en el que se ve que ella supo imprimir a su vida el sello de Dios, encaminar sus obras a la difusión del Reino de Cristo, vivir la experiencia de Dios y ser pregonera de Paz y Bien.
I. Renunció generosamente a los bienes terrenos para vivir en austeridad y pobreza, siguiendo a Cristo a ejemplo de San Francisco de Asís.

II. Adoró reverente a su Dios en la Eucaristía, y encontró en ella el Sacramento de la comunión perfecta con Cristo y el fundamento de la fraternidad universal.

III. Amó y veneró a la Santísima Virgen como a su protectora y le confió el cuidado de su Congregación.

IV. Descubrió y alabó en la naturaleza las huellas del Supremo Creador.

V. Experimentó la presencia de Dios en su vida y la convirtió en un continuo acto de amor y de adoración.

VI. Asumió con humildad el designio de Dios que la escogió como fundadora de una Congregación.

VII. Enseñó con su ejemplo a vivir en la Fe, la Esperanza y la Caridad.

VIII. Atrajo a un gran número de jóvenes para vivir el evangelio según el espíritu de su Congregación.

IX. Confortó con su bondad a los pobres enseñándoles a confiar en la Divina Providencia.

X. Difundió como misionera y educadora, personalmente y con las Hermanas de su Congregación, el Mensaje de la Salvación.
Este "DECÁLOGO" es un compendio de su vida santa y de su acción apostólica que invita a la reflexión y a la meditación, estimula a vivir según los consejos evangélicos y las enseñanzas del Magisterio de la Iglesia.

lunes, 23 de mayo de 2011

EL PRINCIPIO DE TODO


"Las obras de Dios, que desafian la saabiduria de los hombres, tienen origen humilde y pobre, y revolucionan al mundo"




La Madre Caridad Brader realizo, durante medio siglo, una imponente obra en Colombia, la cual impulso e impregno con una intensa y constante vida de union con Dios. Sus muchas fundaciones son ponderadas tanto por los gobiernos civiles como eclesiasticos.